jueves, 7 de junio de 2007

Reflexiones


A fin de cuentas se trata de nacer todos los días. Y de morir por las noches.

Porque el absoluto no existe, la existencia se compone de pedazos encastrados uno a uno, minuto a minuto, segundo a segundo. A veces lo hacemos bien, a veces mal, lo cuál nos indica que lo mejor y más saludable es romper cada vez el rompecabezas hecho.

Mañana será otro día, y nada más real que eso. Volver a empezar, para no pisar astillas y evitar roces con espinas de ayer...

Cómo Penélope, deshacer por las noches lo hecho en el día. Siempre hablando a niveles de pensamiento, razonamiento y hábitos.

Así cómo sacamos la basura diariamente, despojarnos de lo inútil para brillar mañana.

Creánme, esto conlleva al equilibrio y a la paz que tanto necesitamos.


Hernán Mierez

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Siempre tuviste talento para escribir y me alegra que hayas encontrado esta nueva forma de demostrarlo.Te felicito, seguí adelante. Apropósito de Pessoa, te dejo unos versos de él (sabía decir las cosas mejor que yo):

"...y no estoy alegre ni triste.
Ése es el destino de los versos.
Los escribí y debo mostrárselos a todos
Porque no puedo hacer lo contrario
Como la flor no puede ocultar su color,
Ni el río ocultar que corre,
Ni el árbol ocultar que da frutos."
Un abrazo. Rodrigo Mierez.

Maria Coca dijo...

Después de una oportunidad, viene otra, aunque a veces nos quedemos impregnados de noche. Tarde o temprano, el sol sale.

Enhorabuena, amigo.

Besos desde mi mar.

Anónimo dijo...

Gracias...

Anónimo dijo...

A ambos...
De todas maneras, vivir sólo cuesta vida...

Hernán.