miércoles, 17 de octubre de 2007

Juegos Perversos


Animo, denme ánimo,
suerte, deséenme suerte,
que rotas están mis uñas
y ateridos los dedos
de tanto rascar esa idea escurridiza…
La tengo apretada por su cola.
De bruces, los labios besando el frío suelo
la espío por debajo de la puerta.
Una puerta, cualquiera, un límite entre ella y yo.
¡No la voy a dejar escapar!
Quiero jugar, divertirme.
Le doy un milímetro, se agiganta
y feliz saboreo las sensaciones
de tamaño suspenso.
Juego, juego, quiero más…
Muerdo y la atraigo hacia mí,
la puedo ver mejor, la uso ahora
y la vuelvo a soltar apenas.
¡Qué va! Imaginen lo que deseen,
tan efímera es la libertad,
que yo la uso a placer,
y en este constante climax morboso
de tribulaciones incompletas,
soy peón y rey en el tablero cósmico.
Arriesgo mi reina porque quiero ganar
y no quiero.
También quiero perder.
Puedo abrir la puerta y llegar,
pero no quiero llegar.
Es una forma de volar,
flotando entre la tierra de la cordura
y el cielo de la locura.
Un perverso método
para alcanzar la libertad,
luchando por vencer
Mientras juego a perder…




Hernán Mierez ®

3 comentarios:

Maria Coca dijo...

Entre el querer y el poder... Un poema que desprende pasión y corazón. Me gustó.

Besos amigo, desde mi orilla.

Anónimo dijo...

No hay distancias entre el desear y ser...

me gusta como escribes,
un abrazo

Unknown dijo...

Gracias María Y Paola por sus palabras...