jueves, 11 de octubre de 2007

Naturaleza Viva


Reverdece el árbol,
humedece el cielo sus raíces.
Avanza el velero,
soplan nuevos y mejores vientos.
Muere el insulto,
cuándo se insinúa la caricia y el perdón.
Descansa al fin el ave,
cuándo el sol bosteza y se duerme.
Se apaga el fuego lentamente,
ya no queda alimento para su voracidad.
Cesan los ruidos en la gran ciudad;
hay deseos de muerte colectiva.

Silencio.

Se alborotan las calles,
es el momento del nacimiento.
Muchos alzan sus voces, dudan a gritos;
alguien acierta y cura con la respuesta.
Avanza el mal y caen muros enormes;
emerge la voluntad y el bien rearma las ruinas.
Se arruga la piel, se apaga la mirada,
los años preñan la mente de sabiduría.

A veces me seduce el espanto,
me goza, lo gozo
y acabo cada mañana amaneciendo solo.
Vuelvo a casa y me abrazo a la inspiración.
La amo, me ama.
Aún sabiendo de mi obsesiva infidelidad,
persiste su luz
cómo un faro clavado en la dura roca.
Tal orgía de emociones es mi vida.
Que hoy sea hoy
y que mañana desaparezca.
Que nada continúe más allá de su esencia.
Que todo cambie, que todo se transforme.
La eternidad está condenada por su nombre…
Y que yo nunca sea un testigo.
Que pueda sentir el torbellino
desde su latido mismo.
Que pueda pulsar las cuerdas
de este vibrante destino.
Sudará mi piel el dolor,
majestuosos mares cubrirán los abismos.
Navegaré así hacia mi horizonte,
saboreando la dulce música de mis palabras,
ignorante del fin,
creando a cada segundo nuevos comienzos…


Hernán Mierez ®

7 comentarios:

Anónimo dijo...

es bueno que la primera lectura del dia sea un bello poema de amor
es guay, encima, saber para quien lo has escrito (o al menos para quien yo imagino que lo escribiste) e imaginarla con la cara llena de alegria
salud

Maria Coca dijo...

Precioso y repleto de sensualidad, de ganas de vivir y de vida.

Besos desde mi orilla.

Anónimo dijo...

Creador de esencias...

saludos

Unknown dijo...

Gracias Mano, María y Paola.
Van soplando nuevos vientos y se llevan palabras viejas... Traen otras nuevas...
Todo se reduce a dejarse seducir por los momentos...


Besos

Anónimo dijo...

Sera que las palabras envejecen?

No creo, solo cambia lo que queremos decir con ellas,
entonces aparecen pensamientos nuevos, cargados de deseos de vida.
Muchas veces el viento araganea y debemos ocuparnos de sacudir el polvo.
En fin,
creo que ya es tiempo...

Placer, amigo.

Besos.

Gabriela

Anónimo dijo...

Corrijo, Haraganea

Unknown dijo...

Un beso Gaby!