miércoles, 9 de enero de 2008

Manual de uso


Ni los dogmas de las religiones
ni el acervo del antiguo saber,
ni la mentira disfrazada,
ni la urgencia del remedio;
tampoco el fervoroso deseo
o el malicioso grano de la ambición.
Nada más en tu mente
que la higiénica y saludable necesidad
de hacer bien la tarea,
para ir desmalezando los campos
de aquéllos que nos sepultarán…


Hernán Mierez ®

5 comentarios:

Anónimo dijo...

No sobran, ni faltan palabras, la cantidad es exacta.

Y es exactamente también, lo que andaba buscando.

Gracias!!!
Me encata leerte!!! Te lo dije?

Besos

Gaby

Maria Coca dijo...

Un título adecuado a unas palabras que lo dicen todo. Así es...

Besos desde mi orilla.

Unknown dijo...

Gracias Gaby, se que te gusta leerme y ese es el gran y único premio...

Gracias María, más besos desde aquí

Her

Anónimo dijo...

cuando al final de un dia agotador te encuentras un poema tan reconfortante, tan lindo, que dice tantas cosas hermosas (las mentiras disfrazadas), doy gracias a los dioses por teneros cerca, otra vez

Unknown dijo...

Gracias, es la necesidad de expresión el motor de la búsqueda y la consecuencia de la paz...

Her.